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ANUARIO DE DERECHO. Año 29, N° 29. Enero-diciembre 2012. Mérida-Venezuela.
ISSN:0076-6550. 107

A finales de la época de los ochenta y a principios de los noventa,
los precios del petróleo venezolano colapsaron, las disminuciones de
la renta petrolera fueron soportadas por la mayoría del país, (quedando
apenas a salvo los intereses de los grupos conectados al poder del Estado);
esta situación provocó la ruina económica de la clase media y ubicó en
pobreza extrema a una parte considerable del pueblo venezolano. Surgió,
entonces, un divorcio irreconciliable entre esta población en pobreza y la
élite de los partidos gobernantes.

Esta ruptura entre ese considerable grupo de venezolanos sin
recursos y los partidos políticos llevan al poder en 1998, al líder carismático
y anti-partidos, Hugo Rafael Chávez, quien promete desaparecer del plano
político a los partidos políticos y la sustitución absoluta de los factores
reales de poder, a través de una Asamblea Nacional Constituyente.
La popularidad del nuevo presidente fue aumentando paso a paso,
básicamente por su brillante discurso incluyente y vengador, cargado de
gran elocuencia, así como también por la creación de programas sociales
pagados por el aumento escalonado de los precios del petróleo. Tal como lo
afirma Diego J González Cruz: “Entre 1998 y 2008, el precio del petróleo
pasó de 9,38 a 129,54 dólares el barril, y el Gobierno percibió más de
800.000 millones de dólares en ingresos petroleros y no petroleros …”
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originados, entre otros factores, por la reorganización de la OPEP y varios
sucesos económicos y militares que acontecieron en el mundo después del
ataque del 11 de septiembre de 2001 a Estados Unidos.

Muy hábilmente, el presidente Chávez, fue capitalizando su gran
aceptación y popularidad y ejerciendo gran influencia en la conformación
de los nuevos Poderes, hasta lograr que todas las ramas del Poder
público contasen con seguidores, partidarios y hasta familiares. En varias
oportunidades incluso, hizo que funcionarios del Poder Ejecutivo fueran
a conformar el Poder Judicial y el Electoral y que sus orientaciones
ideológicas, partidistas y políticas fueran asumidas por otros poderes.
Simultáneamente, fue logrando un completo manejo de la economía del
país, al potenciar su influencia en la Empresa petrolera y al reservarse a
través de un férreo control cambiario, la administración exclusiva y el
manejo de las divisas provenientes de las ventas petroleras.

En este nuevo escenario, el presidente Hugo Chávez alcanza una
gran popularidad y el control económico y político del país, pues son sus
18 Diego, González Cruz: Venezuela ante la baja de los precios del petróleo, 2009,
revista Nueva Sociedad No 221. p. 1